El tomate deshidratado en polvo es un ingrediente muy versátil, tiene múltiples utilidades, se puede utilizar para potenciar el sabor de una salsa de tomate o de una vinagreta, para el gazpacho o el salmorejo, para hacer un sencillo zumo, para decorar platos, por ejemplo un ajoblanco, para hacer pan e incluso helados. Seguro que a vosotros se os ocurren muchas otras utilidades para el polvo de tomate.
Como cualquier producto deshidratado, el tomate deshidratado en polvo sólo necesita agua o caldo para obtener una pasta de tomate, más densa o más líquida dependiendo del agua que se le incorpore, y claro, dependiendo de la finalidad que se le quiera dar a este ingrediente.
.
.
.
Esta noticia pertenece a Gastronomía y Cía. Para leer el artículo completo, pulsar aquí